El Instituto Inhotim es considerado uno de los más importantes museos de arte contemporáneo del mundo, comportando un gran acervo en medio de un área verde de belleza increíble. Por eso, el complejo ubicado en la ciudad de Brumadinho, en Minas Gerais, es uno de los destinos más buscados por los amantes de la cultura y la naturaleza.

La ciudad de Brumadinho está ubicada en la región metropolitana de Belo Horizonte, a 51 km de la capital minera. El visitante que está un poco más lejos puede ahorrar comprando pasaje aéreo a Belo Horizonte en MaxMillas. En este momento, no hay ningun comentario.

Naturaleza exuberante

El área verde de Inhotim integra, desde 2010, la Red Brasileña de Jardines Botánicos, coordinada por la Comisión Nacional de Jardines Botánicos. Con más de 5 mil especies botánicas, representando 181 familias y 953 géneros – 28% de todas las plantas conocidas en el planeta – Inhotim ostenta 140 hectáreas de área de visitación, además de 145 hectáreas de reserva particular en el dominio de la Mata Atlántica. Son palmeras, imbés, antúrios, vasos de leche, bromelias y más de 330 especies de orquídeas. El paisajismo explora todas las posibilidades estéticas de la colección y choca por la belleza incontestable de la naturaleza.

Arte Contemporaneo

Con inmenso acervo de arte contemporáneo, Inhotim es un gran complejo museológico formado por pabellones, galerías y obras expuestas al aire libre. Conforme el visitante pasea por el jardín, se va encontrando con las diversas posibilidades de visitación. Entre los artistas con obras y galerías permanentes en el museo están nombres destacados en el arte contemporáneo brasileño y mundial como Carroll Dunham, Zhang Huan, George Bures Miller, Chris Burden, Yayoi Kusama, Rirkrit Tiravanija, Tunga, Helio Oiticica, Cildo Meireles, Adriana Varejão Y Lygia Pape. Una vez dentro del instituto, el acceso a todos los espacios está permitido.

Interacción obra-espectador

La máxima “Do not touch, it’s art” de Narcisa Tamborindeguy no se aplica a Inhotim. El museo tiene una serie de galerías, pabellones y obras en las que el arte sólo se completa con la interacción del público. Uno de los ejemplos más emblemáticos es la galería Cosmococa, de Helio Oiticica y Neville D’Almeida, con cinco instalaciones penetrantes que proporcionan al espectador experiencias multisensoriales. Otra atracción imperdible es la obra El origen de la obra de arte, de Marilá Dardot. Se trata de un conjunto de 150 vasos de cerámica en forma de letras, 12 tipos de semillas e instrumentos de jardinería, que invita al espectador a escribir palabras y distribuirlas en campo abierto, formando una plantación de textos e ideas.

Viaje multisensorial

Diversas atracciones en Inhotim aprecian la experiencia multisensorial de los visitantes. Todos los sentidos se afloran durante el paseo en el parque, pero las diversas galerías, pabellones y obras también despiertan todo tipo de sensación. Hay obras que tocan por la visión, otras por el olor. El tacto es constantemente pedido en trabajos de los más variados artistas. Pero uno de los destaques va para la obra Sonic Pavilion, de Doug Aitken. El artista construyó específicamente para Inhotim un agujero con 200 metros de profundidad en el suelo y en él instaló micrófonos que captan el sonido de la Tierra. El resultado es un pabellón de vidrio vacío en el que, de vez en cuando, es tomado por el sonido, garantizando una experiencia auditiva única.

Actividades culturales

Visitar Inhotim no se resume a caminar por el parque y contemplar las obras de arte. El Instituto ofrece una serie de actividades que ocurren a lo largo de todo el año, enriqueciendo el paseo. Son espacios y encuentros como Biblioteca Inhotim, Estación Educativa para Visitantes, Visita Panorámica, Estación Descubrimientos Sensorial, visitas temáticas y restaurante. Las actividades son indicadas para toda la familia y ayudan a conocer más de cerca toda la estructura del museo, además de garantizar diversión.

¿Donde queda?

El municipio cuenta con diversas opciones de hospedaje y la llegada puede ser hecha en coche o de transporte público, partiendo de Belo Horizonte. Como el espacio es grande y hay muchas opciones de entretenimiento, sólo un día de visita puede dejar un gusto de más. Entonces, es indicado reservar un poco más de tiempo para disfrutar del máximo de Inhotim.

Fotos: Reproducción

Fuente: Diario del Turismo